Con el animo puesto solamente en reforzar los conocimientos ya establecidos en las letras, comparto este pequeño artículo sobre las décimas con ustedes, tomado por cierto de Wikipedia. Trataré en lo posible de colocar, aunque sea un tema semanal, sobre poesía, poemas y literatura en general que podrán fácilmente encontrar en el link "PARA VER JUNTOS:Taller literario". Saludos.
Las Décimas.
En general una décima en poesía es una estrofa constituida por 10 versos octosílabos. Actualmente se usa esta palabra con el sentido específico de décima o espinela.La espinela toma su nombre del poeta, novelista y vihuelista Vicente Espinel, de fines del siglo XVI. La contribución de Espinel fue fijar la estructura de rimas de la décima en ABBAACCDDC. Además, sólo puede haber pausas después de los versos pares, particularmente después del cuarto. Durante los siglos XVII y XVIII la décima se usó con frecuencia para el epigrama y la glosa de otros poemas; Félix Lope de Vega, en su Arte nuevo de hacer comedias (1609), escribió que "las décimas son buenas para quejas" en las obras teatrales, pero las empleó indistintamente para cualquier tema. Desde entonces no ha decaído su uso en la poesía española e hispanoamericana como forma tan cerrada como el soneto y apropiada para el poema redondo y el epigrama, y ha sido la estrofa predilecta de algunos poetas de la Generación del 27 como Jorge Guillén o Gerardo Diego.
He aquí un ejemplo de la décima:
Las Décimas.
En general una décima en poesía es una estrofa constituida por 10 versos octosílabos. Actualmente se usa esta palabra con el sentido específico de décima o espinela.La espinela toma su nombre del poeta, novelista y vihuelista Vicente Espinel, de fines del siglo XVI. La contribución de Espinel fue fijar la estructura de rimas de la décima en ABBAACCDDC. Además, sólo puede haber pausas después de los versos pares, particularmente después del cuarto. Durante los siglos XVII y XVIII la décima se usó con frecuencia para el epigrama y la glosa de otros poemas; Félix Lope de Vega, en su Arte nuevo de hacer comedias (1609), escribió que "las décimas son buenas para quejas" en las obras teatrales, pero las empleó indistintamente para cualquier tema. Desde entonces no ha decaído su uso en la poesía española e hispanoamericana como forma tan cerrada como el soneto y apropiada para el poema redondo y el epigrama, y ha sido la estrofa predilecta de algunos poetas de la Generación del 27 como Jorge Guillén o Gerardo Diego.
He aquí un ejemplo de la décima:
Cuentan de un sabio que un día
tan pobre y mísero estaba
que sólo se sustentaba
de unas hierbas que cogía.
"¿Habrá otro -entre sí decía-
más pobre y triste que yo?"
Y cuando el rostro volvió
halló la respuesta, viendo
que otro sabio iba cogiendo
las hierbas que él arrojó.
Pedro Calderón de la Barca. Siglo XVII